Hoy me desperté teniendo cierta imagen en la cabeza; estaba
yo mirándome al espejo y a mi lado una chica hacia lo mismo, me pregunte: “¿Por
qué se miran tanto las mujeres? ¿Qué es lo que buscan en su reflejo?”, cuando
yo me miro en el espejo me veo a mí, veo mis grandes y a veces marcadas ojeras,
mi cara irritada por los constantes arañazos provocados por los granos y
costras, también aprecio las marcas que dejaron mis gatos y algunas otras
mascotas que he tenido, veo mi cara demacrada por la falta de alimentación y atención
que no le doy porque siempre estoy ocupada en cosas que me importan más; la veo
sin color, como amarilla transparentosa, por no salir a la calle porque
prefiero quedarme en casa leyendo o con los videojuegos; veo mi cabello largo y
grasoso, muy grasoso, el cual no he lavabo desde hace un buen tiempo. Cuando
veo todo eso en el espejo me enorgullezco, porque lo que veo es lo que soy, lo
que me he convertido al pasar el tiempo, lo que he sacrificado, lo que no me
importa y me halago por eso; y yo me pregunto: ¿que ven ellas? No puedo decir
que ven su linda cara, lisa, su cabello limpio y peinado, su ropa arreglada;
ellas no ven eso porque su cara muestra preocupación y esa preocupación es
porque ellas pueden verse en el espejo; ellas no ven a alguien, ven nada, ellas
buscan en su reflejo algo que no son y por eso no ven todo lo bueno que tienen,
esa es su inconformidad.
Esto me hace recordar la siguiente fabula que oí hace tiempo
en el metro:
“Había una vez una pequeña ranita que creía ser un grande y
poderoso león, entonces la ranita lanzo un gran rugido -croa- y todas las demás
ranitas se burlaron de ella; al día siguiente la ranita se creía una jirafa,
con un muy largo cuello y la ranita decía a todos –miren mi largo cuello- y
todos se burlaron de ella. Cansada de tanta humillación, se fue a ver al sabio búho
y le pregunto -¿Cómo puedo ser una autentica ranita?- el búho, sorprendido por
la pregunta le contesto –pero, mi pequeña, tú ya eres una perfecta y autentica ranita-
, la ranita indignada por no entender la respuesta del búho se regresó a su
casa. Al día siguiente la ranita se creía un gran halcón, así que fue a la cima
de un barranco, extendió sus grandes y fuertes alas y se lanzó, la ranita caía
y caía y después… murió.”
Muy bien gente espero que esta historia se entienda sin
necesidad de una explicación.
No quiero decir que no tengan ídolos, porque no es malo, es
bueno y admirable, a lo que me refiero es que la mayoría de la población aspira
a ser alguien que no son; gente por favor no hagan eso y mucho menos aspiren a
las figuras de la televisión, porque se van a autodestruir, la idea de seguir a
alguien no es querer ser ese alguien, sino, es mejorarse uno mismo.
Quiéranse a sí mismos, porque si no nadie los va a querer de
verdad.
Esto tal vez suene muy motivacional viniendo de mi parte
considerando que odio a casi todo el mundo y la vida me es indiferente, pero a
pesar de eso yo me amo; amo mi persona y no dudo en irle a presumir de mi a
cualquiera, mi “yo” siempre será el tema principal de mis conversaciones, así
que reitero gente, quiéranse.